Grandes cambios que comienzan con pequeños esfuerzos

Cambiar “un día” al “día uno” aplica para todas las decisiones en nuestra vida. Estamos en la última semana del primer mes del año y aún con el encierro, este mes se me ha ido rapidísimo. ¿A ti? 

Todo lo que hemos postergado a raíz de la pandemia con la promesa de “el día que acabe” voy a iniciar esto… se puede iniciar hoy mismo. Puede resultar cómodo postergar las cosas, pero salir de tu zona de confort te ayudará a sentirte segura y exitosa.

Algo que te puede ayudar para evitar procrastinar es realizar pequeños cambios, en tu alimentación, en tu trabajo, en tu día a día; en tu vida.

Pequeños cambios en tu alimentación

Si has probado realizar dietas estrictas que después de unos días terminas odiando y el rebote viene de manera abrupta, es mejor que realices pequeños cambios que, al paso del tiempo, se convertirán en un hábito. Norma Ángeles, Lic. en Nutrición de @nutriendoconamor nos hace varias sugerencias para contribuir a una mejor alimentación: por ejemplo, cambiar el refresco y los jugos por agua natural, dejar el pan, comer más verduras crudas o frutos secos como snack. Una recomendación que nos hace y me encanta, es llevar un diario de alimentos, así te podrás dar cuenta de lo que comiste y estarás más consciente de balancear el resto de tus comidas. También nos recomienda establecer metas por trimestres, de esta manera, con los objetivos más cercanos se puede mantener el foco y la motivación.

Pequeños cambios en tu vida diaria

Descansa lo suficiente. La falta de sueño afecta nuestro bienestar, si estableces una rutina de sueño como acostarte y levantarte a la misma hora, te sentirás con más energía durante el día.

Toma suficiente agua. Los beneficios de tomar agua son muchos. Previene el estreñimiento ya que mejora la digestión, ayuda también a la piel con algunos síntomas de envejecimiento y además contribuye a eliminar peso; el agua no tiene calorías, grasa, carbohidratos ni azúcar y es un excelente remplazo para las bebidas con alto contenido calórico. Si lo haces un hábito, ¡hasta te va a gustar!

Pequeños cambios en tu rutina de ejercicio.

Con la pandemia, muchos se han dado cuenta que pueden hacer ejercicio en cualquier lugar. Yo llevo más de 4 años haciendo ejercicio con una aplicación y me encanta tener la flexibilidad de hacerlo en la sala o en el estudio, así establezco una rutina de una hora de ejercicio, 4 días a la semana y si algún día no puedo hacerlo, lo cambio. Hay muchas aplicaciones con clases y ejercicios para trabajar todo el cuerpo. ¡Inténtalo!

Siempre he pensado que tener una mente positiva, no es fácil, pero tampoco es imposible. Para que no se nos vaya otro mes sin empezar con estos pequeños cambios, recuerda que “no existe el momento perfecto: existe el momento y lo que tú decidas hacer con él”.

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